¿Son necesarios los abogados para realizar registros de obra o de marca?

Para el mero registro, ciertamente no, pero sí para agregar valor al mismo, no solo para incrementar la posibilidad de éxito en la obtención un registro, sino para aportar a la cadena de valor cosas de importancia vital en la capitalización de la creatividad, como pueden serlo: consejos oportunos, el alertarte sobre futuras consecuencias, responder tus inquietudes, dar puntual seguimiento a tu caso, aportarte referencias sobre casos similares al tuyo, sugerirte aspectos que pudieran brindarte ventajas competitivas y en muchas ocasiones, hasta fungir como un valiosísimo canalizador de tu talento en su red de contactos dentro del gremio.

Escatimar en abogados puede conducir a resultados mediocres o indeseables en cosas que de inicio pueden parecer simples, pero no lo son y si lo fueran, no constituirían materia de especialidad para los abogados. Las marcas y las obras son evidentemente un negocio lucrativo fungiendo por un lado, nada más y nada menos que como signos de identidad para los negocios y para las personas como entes culturales.

La aproximación de un cliente de marca a un abogado especialista en marcas o de una artista a un especialista en derechos de autor, es símbolo irrefutable de profesionalismo en la conducción de un negocio o en el manejo de una carrera artística, pues resulta evidente en el mundo de los negocios que acudir a la guerra sin fusil, equivale al suicidio de los proyectos, las más de las veces.

Si estas a punto de registrar tu marca y tienes dudas sobre el procedimiento que se debe llevar a cabo, por favor contáctame a través de mi perfil profesional de Contacta Abogado®.